Nostalgia Por Lo Análogo En Doble Exposición

El viejo juego de la experimentación al crear fotografías da lugar a sorprendentes efectos visuales, el cual los creadores han sabido explotar, esto es visible en el trabajo de Davis Ayer, quien con sigue en el ferviente uso de su cámara análoga Mamiya RZ que logra captar bellos momentos que nos ofrece el universo y sólo pueden ser atrapados por un instante.

Con cierta atracción por la nostalgia sus imágenes de doble exposición surgen a través de la precisión de detalle técnico, pero en última instancia se rompe casi todas las reglas que hay con presteza impresionante. Fugas de luz, exposiciones dobles, llamarada solar y otras manipulaciones hacen los colores en su película sangran tan majestuosamente y forman la columna vertebral de su obra.

Ese gusto por el pasado hace que Ayer cree sus imágenes fuera del tiempo, un espacio-momento en el que todo sucede a la vez.

En algunas de sus fotografías vemos a mujeres en parajes desolados como si buscasen alguna forma de encontrarse mientras realizan su partida al camino en el que se unirán al universo, esas tonalidades que consigue dotan a las fotografías de un aire místico que de alguna manera nos hace pensar en el espacio, algo muy zen.

Debido a la construcción que hace en su obra todo parece tener cierto movimiento, una energía inquieta que se logra transmitir a los espectadores y de las que somos partícipes, que nos incita a comenzar nuestro viaje hacia lo desconocido.