Leyendas De Las Calles Retratadas Por Antonio Ramos Revillas
Cuando niños era común que nos dejáramos guiar por lo que se dice en las calles y de ahí tuvimos el primer contacto con la narrativa, pues había alguien que nos contaba los relatos de aquellos que se rifaban en los golpes, aquel que era muy buen jugador de futbol, al más galante de la colonia también se le hacía homenaje al contar sus hazañas, así que leer Polo Ortega Cocinero, de Antonio Ramos Revillas, fue regresar a ese momento de la infancia en el que todo lo que nos contaban era fantástico.
Un elemento que sobresale en esta publicación es la violencia que habita en las calles, mas no como algo malo o cargado de odio, sino como algo natural que se puede respirar en el aire y es por ello que en la pirámide social encontramos a Polo Ortega que se dice es todo un maestro en el uso de la navaja.
En ese diálogo en torno a la violencia existe una clara diferencia cuando se trata de humano-a-humano y humano-animal, pues la primera tiene un aspecto salvaje, pero que fue conducido por el miedo, es en ese temor que surge el ataque a otro ser; en tanto que con el animal incluso se trata de todo un ritual y existen reglas que los cazadores deben tener presentes, sino es posible ser afectados por una especie de venganza mágica.
Con un lenguaje propio del norte, Revillas nos introduce en ese mundo donde la ley que se hace valer, es con la navaja, donde un debate se gana a estocadas, por lo que se vuelve un trabajo interesante para los jóvenes que están a punto de pasar a la madurez, tal y como sucede con Polo quien a manera de anécdota relata ese punto de inflexión en su vida tras un hecho inocente y al verse atrapado en una encrucijada sólo pudo recurrir al poder de su navaja.
Sin embargo, nos muestra cómo es que la vieja escuela pese a la violencia respeta al prójimo y se trata de una pelea entre caballeros, un enfrentamiento que al terminar se puede entablar un diálogo cordial entre iguales, así en una pequeña historia es capaz de construir el ambiente salvaje en las calles.
Algo que me encantó de Polo Ortega es que nos hace reflexionar acerca de los hechos que existen tras aquellas figuras míticas con las que convivimos cerca de nuestros hogares, aquellos que viven con las reglas de las calles y con sus hazañas logran trascender al tiempo y quedar plasmados en una publicación.
Este libro fue publicado por Editorial Resistencia como parte de la colección Edubba el cual está ilustrado por Arturo Lechuga Lozano, Zaira Julieta Torres Ambriz y Jorge Alberto Sosa Espejo, quienes logran hacer un choque en el lector presentando tiernas criaturas contrastadas con la violencia que se narra. Así logran ese punto intermedio que significa crecer.