Vida cotidiana plasmada en murales por Manolo Mesa
La obra de Manolo Mesa se centra en los objetos de la vida diaria, el muralista toma fragmentos que rememoran a las tardes en casa de los abuelos. Cada una de sus piezas, que deja en las paredes, tiene elementos que nos acercan a la visión de ese mundo íntimo.
Muchos de sus murales son piezas de alfarería, estos nos remiten a cierta familiaridad, como si encontraramos un pedazo de hogar en las calles. Gran parte se trata de homenajes a fábricas o la comunidad que existen alrededor de éstas.
Para sus murales, Mesa se toma el tiempo de conocer con los habitantes, descubrir sus vidas y dejar constancia de ellos en las paredes, un momento que, pese a lo efímero, es un homenaje para las personas.
En cada una de sus obras nos muestra nuestra relación con lo mundano y cotidiano y lo lleva a la discusión pública. Así que mediante su trabajo, también es capaz de hacer reflexionar ante el cierre de alguna fábrica de cerámica o de estos lugares que son parte esencial de la vida en los pobladores.