Inocencia unida al surrealismo

El fotógrafo Alastair Magnaldo conserva la fantasía e imaginación de un niño que se puede ver en sus imágenes que destacan por la combinación y manipulación de los sueños, por eso es que en estos mundos surrealistas destaca la acción de explorar paisajes que vienen de los sueños y nos permite descubrir.
Su obra destaca por motivos extraños como escaleras infinitas, lunas y estrellas suspendidas en el cielo, aves que cuelgan de hilos cómo si dios fuera un titiritero o algunos compañeros-animales que son amistosos permanecen ocultos detrás de cortinas.
Aunque estas fotografías podrían parecer algo sencillo detrás hay un gran número de horas de trabajo invertido, esto va desde el esbozo de los conceptos que examina de manera cuidadosa en el que cada objeto tiene una función, algo que le puede llevar hasta seis horas para editar y combar los elementos digitales; hasta puede tardar años para capturar una imagen.
Todas las imágenes son © Alastair Magnaldo