Diversión en la Fotografía Oriental

Cuando el mundo se vuelve sumamente muy aburrido el hacer algo creativo te puede ofrecer una escapada para transformar la realidad y hacernos sonreír como lo hace Izumi Miyazaki quien por hobby comenzó a crear una serie de imágenes en las que vemos escenas suburbanas y espacios privados mezclados con el absurdo y el humor con un elemento de surrealismo.
En la actividad que realiza ella se coloca a sí misma en este mundo ficticio, ya que creció de manera solitaria y al multiplicarse y retratarse deja de sentirse en solitario, pues cada foto es manipulada para que lo mundano se convierte en un poco más mágico. Desde levitando corazones de caramelo a la nieve hecha de arroz, Miyazaki sube la mística con un guiño de ojo.
Al poner a sí misma en el centro de atención como el tema principal, Miyazaki se libera para poder jugar con los cambios sutiles en la expresión. Sus fotografías también son un llamado a los temas de la identidad y la mayoría de edad puramente basadas en contexto.
Todas las imágenes son © Izumi Miyazaki